La Movida siempre se ha estudiado desde el punto de vista de la memoria. Los implicados en aquel movimiento socio-cultural que revolucionó la escena musical y artística de la España de los 80, de la transición, han contado la historia como la recordaban, con el maquillaje de la vida y del recuerdo.
'Dios Salve a la Movida' cuenta la historia de esos protagonistas (desde los artistas hasta los locales emblemáticos, pasando por los medios de comunicación) recurriendo a las fuentes de entonces, a las declaraciones de aquel momento, sin maquillaje, sin el tamiz de la memoria y sin la intoxicación de las filias y fobias que el tiempo suele echarnos encima. Los expertos en el tema, los que han leído todo lo que se ha publicado sobre La Movida, los que la vivieron en primera persona o los coetáneos que la vieron desde la barrera encontrarán aquí elementos poco conocidos y puntos de vista que probablemente han olvidado, que no conocían o que han echado de menos a lo largo de todo este tiempo.
Las nuevas generaciones, los que nacieron en los 80, pero ahora adoran a los grupos que imitan a todos aquéllos, los que adoptan la estética de sus padres cuando tenían su edad, los que no vivieron la Movida, tendrán un documento fundamental para saber qué ocurrió entonces y para conocer a personajes, programas o sitios conocidísimos y que siempre salen a colación cuando se habla del tema (como Almodóvar, Alaska, Nacha Pop, Loquillo, La Edad de Oro o La Bola de Cristal) y otros tan importantes pero menos populares, como Costus, Derribos Arias o Fabio McNamara.
Con la colaboración de Jesús Miguel de Marcos.
Silvia Grijlaba
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La Nueva Ola era la versión española de lo que estaba pasando en Londres, París, Nueva Cork y todas las grandes ciudades del mundo: la vuelta del rock and roll y el pop, el renacer del punk, la locura en la pista de baile y la música electrónica.
En España coincidió con el tiempo cuando los niños del baby boom éramos ya jóvenes adultos y teníamos nuestra propia cultura, diferente de la de los mayores porque éramos la primera generación criada en frente de la televisión, con música pop y rock como banda sonora. Las modas y corrientes tenían ya derecho a surgir en nuestras calles independientemente de lo que mandasen Londres, París y Nueva Cork y, para bien o para mal, la Nueva Ola era madrileña hasta la médula. Los trasnochados progres carpetovetónicos acuciados por los vientos de cambio y las nuevas actitudes de los que éramos más jóvenes y estábamos más liberados, iniciaron su proceso para reciclarse en modernos y posmodernos.
Cuando consiguieron concluirlo, había nacido La Movida.
Patricia Godes, epílogo del libro.
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